La excursión de hoy está a 2 horas de Zaragoza: La vía verde del bajo Matarraña
Genial el recorrido en bici para los no-expertos y también para los sabidillos: pasando el día por la vía verde del bajo Matarraña (ARA) – Tierra Alta (CAT)
A la belleza del Parrisal de Beceite, la buena cocina del Matarraña y el precioso Valderrobres hay que añadir un destino turístico que es la vía verde. Está bien señalizada, rodada, con servicios, con gente de todas las edades y piernas bicicleteras.
El recorrido completo de la Val de Zafán hasta el Ebro es mucho mayor, nosotros hemos hecho solo un tramo pero cada cual puede ampliarlo según sus deseos y tiempo libre.
Nuestro día en bicicleta comenzó en el albergue de la Estación de Cretas, chulísimo, nuevo, acogedor y bien equipado. Cretas está a 2h de Zaragoza. Si vas a ver la locura sonora de la Semana Santa en el bajo Aragón puedes aprovechar y organizar una escapada 😉
Nosotros fuimos en coche pero sin bicis, así que elegimos una empresa de alquiler de bicis con todos sus accesorios -bici de adulto, bici con carrito portaniños y cascos- que disfrutamos durante todo el día hasta la hora de recogida. Muy muy bien organizados y dispuestos, con perfectas explicaciones de la ruta y puntuales en la recogida a media tarde en el punto de llegada.
El recorrido desde Cretas a Xerta nos llevó desde las 9 de la mañana a las 5 de la tarde con múltiples paradas, fotos, tragos de agua, paradita en las estaciones reconvertidas en bar, juegos de aventura, bañito de pies en la Fontcalda, comida al aire libre y siesta. Fue un lujo paisajístico y todo cuesta abajo, con un muy suave desnivel. Son 44 kms muy llevaderos donde hay que atravesar decenas de túneles, recomendamos frontales, linternas, o unirse a grupo que sí las lleve. Jeje. En todos los caminos hay gente amable máxime cuando vas en familia.
Es fácil seguir las indicaciones, tanto con plano en papel, con el track descargado, o simplemente seguir la señalización de las vías verdes. Nosotros empezamos desde el centro de Cretas y en poco más de 1km. nos incorporamos a la vía verde (que venía del albergue donde habíamos dormido). Los primeros kilómetros nos sirvieron para habituarnos al perfil y al peso, el carrito portaniños es fácil incluso para los papis poco iniciados sobre las dos ruedas. Los primeros paisajes son olivos y almendros, camino en línea recta con varios pasos y puentes, cruzamos el río Algars en unas vistas preciosas que son límite natural entre Aragón y Cataluña.
El paisaje se llena de frutales y luego de pinares y entramos en bosquetes continuando la vía verde, hay miradores y áreas de descanso, puentes elevados, viaductos y barrancos. Tras unos 20kms llegamos a la estación de Bot, genial el vagón restaurado y ¡convertido en bar! Refrescos y gente a tutiplén, con muy buen ambiente. Llevábamos 2h en bici -habíamos pasado ya por 8 túneles- y estuvo genial el refrigerio. Además hay fuente para rellenar los termos.
Seguimos nuestro camino que se adentra en las sierras prelevantinas y en menos de una hora llegamos a la Fontcalda: un precioso lugar donde darse un remojete, había restaurante pero nosotros y la mayoría de las familias extendimos nuestras viandas a orillas del río para comer y descansar. Las 13h30 es una buena hora para comer. Como bien indica el nombre de “Fontcalda” hay manantiales de agua templadita que bien merece un rato de reposo.
Despojados de la pereza que nos dio la siesta y rellenos otra vez nuestros termos reemprendimos la vía verde: nos restaban 17 kms para llegar al destino donde nos recogerían. Íbamos muy bien de tiempo y de piernas, así que nos permitimos descansar en las áreas de descanso del Pinell de Brai, lleno de gente, ciclistas y paseantes y gente pasando el día.
El último tramo discurre entre paisaje verde oscuro y muchos más túneles, ¡gracias que llevábamos linterna!, no obstante la vía verde estaba muy transitada de bicis y también de senderistas.
Salimos de las montañas y de repente nos llegó olor de agua, una inmensa cantidad de agua, y es que los últimos 6kms discurren tan cerca del Ebro que podemos jugar a tirar piedras. El Ebro se deja tocar, vimos saltos de agua, empresas que aprovechan la fuerza del río que discurre manso y reposado. Estábamos ya muy cerca de la estación final en Xerta y… ¡misión cumplida!. Además en la estación donde nos recogen, a nosotros y a otras muchas personas, hay fuente y parquecito así que un poco de tumbing y descansing antes de montar en la minivan que nos lleva de regreso a Cretas, nuestro punto de origen esta mañana a las 9.
Nota: la vía verde desde La Puebla de Híjar a Tortosa son 137 kms. para aquellos que quieran una escapada más larga.
Todo el detalle de las vías verdes se encuentra en su web oficial: viasverdes.com . Con mapas detallados, donde dormir, áreas de descanso, túneles, desniveles, etc. Y hallaréis muchísimas fotos e información en las webs de las localidades por las que discurre, en las empresas de ocio activo y en los alojamientos.
El recorrido que hicimos está bien para adultos con carrito portaniños pero hay otros recorridos para piernas de mini-ciclistas y recorridos circulares. El tramo Cretas-Xerta es el más atractivo por su paisaje.
Texto y fotos, Silvia Lanuza