Mucho más cerca de lo que imaginas, un sinfín de rutas, caminos y recorridos en plena naturaleza aguardan a ser transitados en bici por familias con ganas de disfrutar de una jornada al aire libre. Sin salir de la propia provincia de Zaragoza, son muchos los senderos que se pueden realizar, y de todo tipo de dificultades. Lagos, montañas, ríos, pasarelas e incluso castillos y molinos son algunos de los atractivos que encontrarás en la selección de rutas que hemos hecho para ti. Así que… ¡No hay excusa! Coge tu bici, tu casco, un poco de avituallamiento y agua -que el deporte siempre da hambre- y… ¡A pedalear!
Hoy te damos 6 ideas para pedalear en familia. Unas son más complicadas que otras en cuanto a desnivel se refiere. Indicamos los datos al final de cada ruta.
Las de más pendiente las dejamos para peques más mayorcitos, pero todo depende de cada niño y lo acostumbrado que esté.
Ruta de los miradores de Monegrillo
A unos 50 minutos de Zaragoza se encuentra Monegrillo, una localidad con poco más de 400 habitantes. Se localiza en el desierto de los Monegros, un hábitat único en Europa, con un ecosistemas más propio de las estepas orientales.
El recorrido parte del propio pueblo, por la pista que sube a la sierra de Monegrillo. Al poco de partir se encuentra la balsa Frella, y más adelante la milenaria sabina Carrascosa. La pista lleva al alto de La Estiva, donde se localiza el primer mirador. Desde allí tendremos una amplia vista 360º de la estepa monegrina.
Al estar a más altura, podemos encontrar flora propia de altitudes mayores, como los pinares carrascos. Este pinar carrasco conduce la ruta hasta el segundo de los miradores: la Gabardera. Desde allí se observa buena parte de las muelas y relieves que se recortan por profundos barrancos hacia el valle del Ebro. Si te apetece alejarte un poco del camino, muy cerca queda un refugio forestal que permite pasar la jornada de campo.
La pista prosigue perfilando la cabecera del barranco de Torre Ventosa. En ese punto del recorrido, hay que tomar un desvío que lleva al tercer mirador, el del Bujal. Enseguida, a la derecha, se desvía por La Escalera el sendero peatonal señalizado que acorta la ruta y que finaliza en Monegrillo o la sabina Cascarosa.
La pista continúa descendiendo por la vaguada de Valdelcarro y desemboca en la carretera HU-V-8112. Al cabo de circular por ella un kilómetro y medio después, la ruta se desvía a la derecha junto a una pequeña balsa para ganados que lleva, 800 m después, hasta otra balsa, próxima al corral de Miramón. Junto a este corral un camino asciende hasta el último mirador, el de Miramón.
De ahí se regresa al punto de partida, el pueblo de Monegrillo. Es una ruta circular que, solamente por las vistas, merece la pena.
• Distancia: 28,26km
• Dificultad técnica: Media
• Altitud mínima: 750 metros
• Altitud máxima: 420 metros
Valdespartera – Parque de PLAZA
Para los más perezosos, esta ruta es idónea. No hace falta ni salir de la ciudad. Tan solo una bici en buen estado y muchas ganas de pasar un buen rato practicando deporte. Te recomendamos que, aunque vivas lejos de Valdespartera, te montes en el tranvía -porque sí, está permitido subir con bicis cuando no hay demasiada gente- y lo dejes en la parada de Mago de Oz.
12 kilómetros y medio con apenas desnivel y el Canal Imperial como guia del recorrido a seguir te amenizarán la mañana.
Este sendero urbano parte de Valdespartera. Gracias al carril bici, aparecerás prácticamente sin darte cuenta en el zaragozano barrio de Montecanal. De ahí, sin dejar de lado el Canal Imperial de Aragón, pasarás por Rosales del Canal. Una vez que dejes atrás Rosales, tendrás que tomar el Puente de La Muela. Ya cerca de la autovía A-2, y casi siguiendo su trazado, llegarás al Soto de Miralbueno. Ánimo, porque la meta ya está cerca. Además, no te preocupes, es un camino totalmente llano. Y directamente desde el Soto de Miralbueno, de nuevo junto al Canal, unos kilómteros después concluirás la etapa en el Parque de PLAZA, donde un laberinto te está esperando. Incluso si tienes suerte, quizás puedas ves aterrizar algún avión, ya que tendrás el aeropuerto de Zaragoza a escasos metros de ti.
Su facilidad hará que no estés solo en este trayecto, seguro que te cruzas con otros zaragozanos caminando o en bici, casi todos ellos en familia. ¡Ah! Y por supuesto contarás con el sonido del agua y de algún que otro pajarillo durante tu ruta.
• Distancia: 12,45km
• Desnivel: 54 metros
• Dificultad técnica: Fácil
• Altitud mínima: 235 metros
• Altitud máxima: 270 metros
Ruta hasta el mirador de las planas – Cadrete
Si quieres algo más atrevido para ti y los más mayores… Te recomendamos esta ruta. En el Mirador de las Planas, en Cadrete, a 12 km al sur de la ciudad de Zaragoza, podrás disfrutar de unas vistas privilegiadas y unos molinos gigantes de más de cien metros. Además, durante el camino, podrás apreciar las ruinas del que fue el Castillo de Cadrete. Se cree que es de origen musulmán y está rodeado de acantilados de unos 70 metros de alto en casi todo su conjunto, siendo accesible únicamente por su parte sur.
La subida hasta el mirador se puede dividir en tres partes:
La primera es la más dura, sobre todo el primer kilómetro que roza el 10% de pendiente media. El terreno en esta zona está asfaltado, cosa que te ayudará bastante a la hora de pedalear. Dejando el castillo a la izquierda y después de otro kilómetro al 8% de media, llegas a la mitad de la ruta.
Tras pasar el primer tramo, ya no encontrarás suelo asfaltado, aunque la tierra está en perfecto estado, sin muchos baches, cosa que te ayudará bastante durante la subida. Atravesando algún pequeño tobogán de tierra, alcanzas la parte final de la subida.
Algo menos de kilómetro y medio donde la pendiente vuelve a subir, pero no excesivamente. Una vez en la cima, y habiendo atravesado una de las rutas más complicadas de este post, podrás disfrutar de unas vistas privilegiadas y un gran ejército de molinos.
Aquí te dejamos algunos datos a tener en cuenta antes de coger la bici:
- Distancia: 4,35km
- Desnivel: 292 metros
- Pendiente media: 6,7&
- Km más duro: 9,8%
- Altura puerto: 608 metros
Vía Verde del Tarazónica -Tarazona
Casi en la frontera entre Navarra y Soria se encuentra Tarazona, una localidad en una situación inigualable. Y es que si te gustan las buenas vistas, la Vía Verde del Tarazónica es un sendero de foto. Este municipio, conocido internacionalmente por su Cipotegato -un personaje verde, amarillo y rojo, que cada 27 de agosto sale a las calles de la ciudad y es recibido por una lluvia de tomates- cuenta con una ruta que une la localidad zaragozana con la vecina Tudela, en la Comunidad Foral de Navarra. Y todo ello bajo la mirada de un atento Moncayo que no te abandona en ningún kilómetro del camino. 22 son los kilómteros que nos guiarán por las orillas del Queiles y nos adentrarán en el Parque Natural del Moncayo, una cumbre rodeada de leyendas e historia.
La ruta Vía Verde del Tarazónica debe su nombre al ferrocarril que un día existió y que unía estas dos localidades vecinas. A continuación, se indica el recorrido desde Tudela hasta Tarazona, pero se puede hacer en sentido inverso:
Se parte de la actual estación de ferrocarril de la ciudad navarra. De ahí, abandonamos la estación por una nueva rampa que nos sitúa en un carril-bici de color verde sobre el Camino Caritat. La calle desemboca en un paso sobre las vías de Renfe -ojo, está en activo-. A mano izquierda dejaremos un puente para seguir por la Vía Verde, que enfila hacia el trazado del Tarazonica. Tras cruzar la antigua carretera nacional, comienzan las rectas.
En el kilómetro 3,3, alcanzaremos la estación de Tudela, pasando junto a la plaza de toros. Al poco encontraremos una pequeña área de descanso con elementos que recuerdan el pasado ferroviario de esta ruta. Después de atravesar la nueva pasarela sobre Carretera de Ablitas, en el kilómetro 4, se nos presenta un olivar. Al otro lado, la Vía Verde cruza las aguas del Canal de Lodosa, que riega las huertas con agua del Ebro. Al otro lado de este canal, en el kilómetro 6, una nueva recta se abre hacia el Moncayo, cruza por debajo de una autopista y un camino rural, que nos lleva a los andenes de la estación de Murchante.
Ya estamos en el kilómetro 7. Comienza un ascenso -no muy acusado- hacia el primer gran terraplén de la ruta. Luego, se llega a Tulebras -último pueblo de Navarra, junto a la Carretera de Barillas-, donde podemos visitar el Monasterio de Santa María de la Caridad (S. XII), primer convento cisterciense femenino de España. Tras visitar el convento, se puede disfrutar del área de descanso.
Alcanzado el kilómetro 15, llegamos hasta las estaciones de Malón, ya en la comunidad aragonesa. Allí también hay un área de descanso donde se pueden reponer fuerzas.
Ya en el kilómetro 16, nos adentramos en una trinchera de casi dos kilómetros. Esta trinchera concluye en la explanada construida para el apeadero de Vierlas.
Poco a poco comienza a vislumbrarse Tarazona, y con ella su estación, punto final del recorrido, que hoy es un edifico cultural para visitantes.
• Longitud: 22 km
• Usuarios: adaptado a todo tipo de públicos, edades y condiciones
• Tipo de firme: vía verde con firme mixto -asfalto y zahorra compactada-
Mirador de Torrecilla – Torrecilla de Valmadrid
La llegada hasta el Mirador de Torrecilla de Valmadrid, municipio y barrio rural de Zaragoza, es un clásico paseo en bici situado a los alrededores de la capital maña. Se trata de un mirador al noreste de la zona del parque eólico de las Planas, con bonitos paisajes y accesos desde Torrecilla de Valmadrid, por pista o, si lo prefieres, llaneando por las Planas.
El camino no es difícil. Solamente el último tramo. Desde el inicio de la ruta en Torrecilla de Valmadrid, disfrutarás de un camino ancho y sin baches apto para profesionales y principiantes del ciclismo. No te preocupes, la pendiente media no te supondrá un problema en la mayoría de la ascensión. Sin embargo, no todo va a ser fácil. Durante esta subida a cielo abierto, es muy probable que te toque pedalear contra el cierzo.
En general, es un puerto corto, de algo menos de cuatro kilómetros, donde vas ganando altura muy moderadamente. Hasta llegar al último kilómetro. Ahí la cosa cambia un poco. Y la pendiente, también. Al entrar en un pinar, la subida se dispara por encima del 11% y se prolonga hasta la llegada al mirador. Pero, no te preocupes, todo tiene su recompensa, y arriba tendrás un banco y unas preciosas vistas para descansar tras la subida.
Aquí te dejamos algunos datos a tener en cuenta antes de coger la bici:
- Distancia: 3,9km
- Desnivel: 258 metros
- Pendiente media: 6,5%
- Km más duro: 11,11%
- Altura puerto: 635 metros
De Luna hasta el Santuario de Monlora
El santuario de Monlora, a cinco kilómetros de Luna, es un enclave referente para muchos cincovilleses. El edificio fue construido en el 1500, remodelado y modificado después en el 1762. El monasterio permanece en muy buen estado de conservación, principalmente por la restauración a la que fue sometido en la década de los noventa y por el uso que tiene actualmente como hospedería. Y por si fuera poco, el lugar se convierte en una ruta perfecta para hacer en bici.
Según detalla el Ayuntamiento de Luna en su página web, «el origen etimológico de Monlora puede ser Monte de la Aurora, Monte oloroso o Monte de las flores. En el primer caso, por ser morada de la Madre del Señor, nombrada en los Gozos como Aurora del Sol Divino. Los otros nombres hacen referencia a la frondosidad de la vegetación y variedad de plantas que cubrían el monte, un verdadero jardín botánico según las descripciones que nos han llegado de épocas pasadas».
Si te pica la curiosidad o te has animado a hacer esta ruta, deberás partir desde Luna, un pequeño municipio de la comarca de las Cinco Villas a poco más de 60 km de la capital aragonesa. El terreno hasta el mirador es sencillo: la bici rueda fácil debido al buen estado del asfalto. La subida es corta, unos 4 km, y no tiene pendientes excesivas, por lo tanto es un puerto accesible para ciclistas de todos los niveles. La pendiente máxima que alcanzarás en esta ruta ronda los 8,5%, durante el tramo final del camino. En la última curva es donde la pendiente se estabiliza para llegar llaneando a la cima del puerto.
Cuando llegues a la cima, no solo podrás disfrutar de las vistas -al norte, los Mallos de Riglos y la Peña Oroel, al este la sierra de Guara y al sur, el Moncayo- también podrás descubrir el convento, la iglesia, la hospedería o comer en su restaurante. Te recomendamos que te lleves unos buenos prismáticos porque las vistas lo merecen. Quizás… hasta veas volar algún que otro parapente.
Aquí te dejamos algunos datos a tener en cuenta antes de coger la bici:
- Distancia: 4 km
- Desnivel: 210 metros
- Altura mirador: 658 metros